Treinta minutos de ejercicio al día (con la aprobación de tu médico) pueden reducir el riesgo de complicaciones como diabetes o preeclampsia. Además, el ejercicio se ha asociado con partos más cortos y recuperaciones más rápidas. Pero no todo es caminar, puedes permitirte practicar algunos deportes suaves. Independientemente de los ejercicios que vayas a probar, no olvides avisar al instructor de que estás embarazada para que modifique algunos movimientos si fuera necesario.

Natación.

La piscina te permite sentirte ligera, para variar, liberando las articulaciones y los órganos comprimidos del peso mientras ejercitas una amplia gama de grupos musculares.

Yoga.

El Yoga no es solo beneficioso para tu cuerpo, sino que también te permite aprender a respirar, a aplicar técnicas de relajación que serán de gran ayuda durante el parto, y algunas posturas que podrás probar si vas a pasar el parto sin epidural.

Pilates.

Al centrarse en tu núcleo, practicar Pilates puede contribuir a mejorar tu postura, prevenir dolores de espalda e incluso ayudarte cuando llegue el momento de empujar.

Danza del Vientre.

Esta danza tradicional de Oriente Medio se utilizaba en la antigüedad para ayudar a las mujeres a prepararse para la maternidad, tranquilizando al bebé y preparando el cuerpo para el parto.

Es importante que elabores una lista con los ejercicios que has probado y los que no, así como también tus anotaciones varias relacionadas con cada uno de los ejercicios y las sensaciones que te han dejado.

En Galenika Cosmetics trabajamos día a día por tu bienestar y el de tu familia, esperamos que esta pequeña guía te haya ayudado, no dudes en compartirla.

GALENIKA COSMETICS despertando sensaciones!

¡El Sentir de la Vida!